jueves, 1 de agosto de 2019

Videojuegos, mi hermano & mi ex

Rá, el dios egipcio favorito de mi hermano 

Empiezo. Mi hermano es un tipo difícil de descifrar -o era, hace más de tres años que no lo veo, ahora vive en Tailandia con su novia-, éramos quizá tan parecidos -incluso ambos nacimos en agosto- que nos costaba mantener una relación demasiado estrecha. Para mí la cosa estaba clara: lo quería, lo admiraba desde la periferia -es un hombre brillante, economista, con mucho conocimiento de historia- y era muy chistoso (aunque a veces hiriente). Desde que era pequeña compartimos un vínculo: los videojuegos. Con él aprendí a jugar Bomberman, Age of Empires (I, II, Mythology, Titans), Need For Speed, Sims 3 (hahá), Dofus y, cuando ya tuvo una consola, Assasins Creed, Forza y FIFA. Nos reuníamos para jugar y, en ese lenguaje complejo de hermanos, nos expresábamos el cariño haciéndonos bullying en el juego. Nunca tocábamos temas personales, limitábamos la conversación a comentarios sobre la trama del juego, la táctica y cualquier descubrimiento o hallazgo. Era nuestra forma de decirnos: 'Oiga, usted me importa, lo/la quiero, juguemos, compartamos'.
Mis hermanos y yo siempre nos hemos tratado de usted. No hay cabida para el desbordamiento de afecto ni el tuteo, para preguntas demasiado íntimas y/o profundas. ¿No es así toda relación de hermanos?
Antes de que se fuera a Australia y, más tarde, a Tailandia, le presenté LoL (League of Legends), comenzamos a jugarlo y, por primera vez, yo tenía más habilidad en un juego que él. Con mi ex novio íbamos a campeonatos y convenciones de LoL y juntos le enseñábamos a mi hermano. Al poco tiempo renunció a su trabajo por el viaje que se avecinaba y tuvo todo el tiempo para jugar y compartir conmigo y mi ex. Nos desvelábamos los tres con la consola, además, por ese entonces yo trabajaba en una videotienda y debía probar juegos nuevos de xbox, play y wii, de modo que era casi un deber -en el que ellos 'en sacrificio' me acompañaban-.
Mi relación con Sergio comenzó a desmoronarse y al poco tiempo mi hermano se fue del país. Sergio se convirtió en mi ex y aun así ambos fuimos a despedirlo al aeropuerto: ellos ya eran tan cercanos que incluso me hacían sentir excluida y algo celosa, debo admitir. No hay cosa que extrañe más de esa relación. Esa sensación de hermandad y confianza, es inigualable. Pero todo pasa.
Hace unos meses retomé LoL y, entre las cosas maravillosas que me ha dado la vida, tengo la fortuna de jugarlo con Miguel, mi pareja actual. Es una forma de relajarnos. Ambos somos buenos, nos gusta y compartimos la afición cada que tenemos tiempo y/o mucho estrés. A mi hermano lo sigo extrañando pero jugando videojuegos, escuchando power ballads y leyendo sobre historia puedo sentirlo cerquita.

Y a ustedes, ¿que videojuego los transporta?, ¿los desestresa?, ¿los hace recordar a alguien especial?

PD1: Este post está patrocinado por Rá
PD2: Hermano, si lee esto, no lo quiero. Me cae mal. Muy mal. Ah, y ya casi cumplimos años.
PD3: Ex, si lees esto, claro, a veces extraño mucho esas madrugadas de partidas y xbox. El cariño no se disuelve.
PD4: Novio, si lees esto, tú sabes todo sobre mí. Extrañar algo no significa que lo nuestro no sea maravilloso e increíble. Love u.

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